El próximo 20 de marzo está previsto un eclipse solar que podría tener alguna que otra consecuencia, y entre ellas podría ser la interrupción de la generación de electricidad, a partir de fuentes fotovoltaicas en diferentes países. El eclipse supondrá un reto para el sector eléctrico europeo. Los operadores técnicos de la energía fotovoltaica puede que se tengan que enfrentar a una caída de la generación de hasta 33.501 MW solares. Ésta cifra es prácticamente, la misma energía que consume España.
El fenómeno está previsto que comience a las 8:40 y terminar a las 12:50 (hora centroeuropea), será una prueba sin precedentes para el sistema eléctrico de Europa. Es por ello que, la Red Europea de Gestores de Redes de Transporte de Electricidad tiene en cuenta que no se puede descartar la idea de que se produzca un incidente.
Los equipos técnicos de alto nivel se han reunido con el organismo europeo que coordina las redes europeas, Entsoe, para elaborar un plan para hacer frente a esta caída de la generación fotovoltaica, que además es el primer reto ante un fenómeno de estas características. Entsoe indica que es la primera vez que se espera un impacto de relevancia sobre la seguridad de suministro eléctrico.
Pero, ¿y en España?
La Red Eléctrica de España cuenta con el Cecre, un centro de control especializado en energías renovables, que permite gestionar en todo momento la carga del sistema con energías renovables para hacer frente al eclipse del próximo 20 de marzo. Aunque durante el eclipse, la Red Eléctrica no se prevé que sean necesarias medidas adicionales a las que se toman de forma habitual, estudia todas las variables posibles para poder garantizar la seguridad y calidad del suministro eléctrico de alta tensión en todo momento.
Expertos en políticas energéticas sostienen que España no tendrá problemas porque cuenta con un sistema, desde unos 10 años, que prevé que se compensen unas energías con otras en este tipo de situaciones.
Si finalmente fuera necesario tomar medidas para ajustar la capacidad de producción en España a la demanda, según el plan de contingencia que tienen preparado, el operador del sistema cuenta con la posibilidad de poder aplicar la interrumpibilidad a las grandes industrias.
